¿Te has planteado alguna vez la
importancia del arte para el desarrollo y bienestar de la persona?
Podríamos fundamentar nuestras
argumentaciones en grandes autores y sus teorías sobre el aprendizaje, la
psicología, la sociología, la pedagogía y el desarrollo de la inteligencia emocional. Autores como
Piaget, Vygotsky, Ausubel, Coll, Koffka, Rogers, Woods, Bandura o Maslow son conocidos
por todos y estudiados por cualquiera que se mueva en el mundo de la pedagogía
o la psicología.
Pero en esta ocasión nos vamos a
centrar en nuestra experiencia, ya
que hemos comprobado lo que el arte provoca
en nuestros talleres: vivencias desde las que niños, niñas, adolescentes y
adultos descubren una nueva manera de “mirar”, de “experimentar”, de “sentir”,
de “trabajar”…
En el mundo global de la
tecnología y las prisas es fundamental desarrollar
la capacidad de detenerse para mirar alrededor, observando y descubriendo
lo mejor de cada momento, con el fin de crecer
como personas emocionalmente sanas,
capaces de desenvolverse con soltura en un entorno cambiante.
En nuestros talleres nos acercamos a las obras de arte para
admirarlas, analizarlas, criticarlas, situarlas en el contexto en el que fueron
creadas y hacerlas nuestras desarrollando
una versión diferente, atrevida y divertida.
Observamos lo que nos rodea,
personas, objetos, edificios, plantas, paisajes y los analizamos, los
construimos y los deconstruimos, los disfrutamos, los sentimos nuestros y nos
expresamos tomándolos como referencia.
Por eso ayudamos a los niños,
niñas y adolescentes en su desarrollo
emocional, cognitivo, físico y social. A los mayores les ayudamos a socializar, a mejorar su
autoestima, a trabajar la memoria y diferentes capacidades cognitivas y psicomotrices
fundamentales en esta etapa de la vida. Porque nuestros mayores son
experiencia, riqueza y sabiduría para nuestra sociedad.
Pero además, los ARTalleres son una herramienta perfecta para que las empresas, porque en ellos trabajamos de una manera muy particular y
adaptada a cada empresa temas como motivación, cohesión de equipos,
comunicación, gestión de tiempo, organización del trabajo y multitud de
capacidades, habilidades y actitudes básicas para el buen funcionamiento de un
equipo de trabajo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario